Esta información es parte de nuestros informes RIA que cada semana llegan a más de 400 líderes del agronegocio local.

El monitoreo que venimos realizando sobre las importaciones de fertilizantes muestran un fuertísimo crecimiento en las relativas a las fuentes de nitrógeno, UAN y urea, pero particularmente esta última. En el periodo enero a noviembre el volumen roza las 760.000 toneladas, prácticamente triplicando las del año pasado y duplicando las de 2016, el año que marcó un cambio de tendencia en el consumo de fertilizantes.

En tanto las de UAN acalzan las 469.000 toneladas, 30% por arriba tanto de 2017 como de 2016. El aumento del área sembrada con gramíneas, así como la mejora en las rentabilidades (previo a la reimposición de retenciones) animó a los productos a llevar adelante una estrategia más agresiva, buscando mayores rindes sin resignar calidad.

La cosecha de trigo permitirá visualizar los resultados de esta estrategia, una vez que esté concluida, ya que se espera una producción record, arriba de las 19 millones de toneladas, con un contenido de proteina muy bueno.

El gráfico adjunto muestra que restando un mes para concluir el año, las importaciones de los cinco principales fertilizantes ronda las 2.5 millones de toneladas, a lo que hay que sumar la producción nacional de urea y superfosfato.

La AC Fertilizar ha estimado que el consumo de fertilizantes en 2018 alcanzó la cifra récord de 4 millones de toneladas, de producto.