La siguiente información es parte de nuestro informe semanal RIA

De acuerdo a las estadísticas del INDEC se observa una creciente importación de urea, tendencia que se acelera a partir de julio del corriente año. Al mes de octubre el acumulado rozaba las 700.000 toneladas, con un pico de 233.000 toneladas alcanzado en agosto.

Se trata de un volumen significativo, que duplica las importaciones de 2016, cuando tras haberse quitado los derechos de exportación y devaluado el peso, se produjo un importante ingreso de fertilizantes. En este año, el conjunto de los cinco principales fertilizantes utilizados en el país supera las 2 millones de toneladas más del doble de lo importado a la misma fecha de 2015.

Nuestra interpretación de los datos es que la expansión del área cerealera, sumado a una actitud más agresiva de los productores en busca de mejores rindes y calidad del grano, están creando un nuevo piso de demanda para los fertilizantes nitrogenados.

En nuestro país, la producción de urea roza 1,2 millón de toneladas, que en un 90% se consume internamente. Entendemos que de alcanzar una demanda adicional en el orden del 60% o más de la producción, se estarán dando condiciones propicias para analizar la instalación de una nueva planta o bien duplicando la actual. En este último caso, el consumo interno estaría asegurando más de la mitad de la nueva producción, restando un tercio o un 40% para exportar a la región, particularmente a Brasil que es demandante de este fertilizante.

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