Recientemente la Gerencia de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales y la Fundación INAI presentaron un trabajo de investigación en el que se analiza el intercambio agrícola comercial entre Argentina y China. El informe destaca que si bien las exportaciones locales hacia el gigante asiático lograron crecer hasta convertirlo en su su segundo mercado, detrás de la Unión Europea, el desempeño  ha sido menor al de sus competidores, perdiendo lugares como proveedor agroindustrial a este destino que no para de crecer en demanda.

Según se destaca en el trabajo titulado: “Relación Argentina – China: aprovechando la oportunidad del contexto”, China se convirtió en uno de los principales jugadores de la escena internacional. Sus compras de bienes agroindustriales crecen a una tasa del 16% anual, alcanzando en 2018 más de u$s120.000 millones de importaciones, ubicándose como el 2º importador mundial.

En este contexto, Brasil pasó a liderar el ranking de proveedores de China, desplazando a EE.UU. Pese a que China se ha convertido en uno de sus principales socios, Argentina, en cambio, perdió posiciones en el mercado chino debido a un desempeño más pobre que el del resto de sus competidores. En particular, mientras Brasil (con un 21% de ventas) ha crecido a tasas por encima del promedio mundial (16%) en las últimas dos décadas, EE.UU. lo ha hecho por debajo (13%) y Argentina muy por debajo de este crecimiento, con apenas un 4%. En efecto, se observa que hasta 2008 el país crecía a
tasas similares a Brasil, pero desde entonces han venido reduciéndose.

Por otro lado, las exportaciones argentinas a China se concentran en unos pocos productos. La soja es la más relevante, totalizando el 63% de las exportaciones como promedio del período 2016/2018. La carne congelada representa el otro 15% y los camarones y langostinos congeladas otro 7%. Es decir que tres productos representan el 85% del total de las exportaciones.

El documento explica además que la guerra comercial entre Estados Unidos y China y la fiebre porcina africana representan una oportunidad para Argentina. Pero más allá de esta circunstancia, los analistas detallan que las exportaciones aumentaría a otros 5,7 mil millones de dólares si Argentina es capaz de poner otros productos en ese mercado, como sorgo, queso, vino, maíz, trigo y leche en polvo, entre otros.

Finalmente, el documento recomienda un enfoque regional (Mercosur) para abordar el mercado de China, y construir la imagen de un país confiable, como proveedor de alimentos y otros productos agrícolas, y consolidar una relación mutua donde las inversiones de China en Argentina puedan beneficiar el comercio bilateral. .